Ahora nuestros hijos aprenden cada vez antes hitos que nosotros no aprendíamos en el colegio ni con dieciséis años.
Su generación es totalmente diferente a la nuestra y los pasos son tan grandes de una generación a otra, que no podemos ni imaginar lo que llegaremos a conocer según vayamos haciéndonos más mayores.

Es increíble ver cómo hay herramientas para todo tipo de aprendizajes, a través de aplicaciones y dispositivos, pero lo que realmente me parece curioso e importante poder enseñar a nuestros pequeños, es el funcionamiento, la herramienta desde dentro, el paso a paso y cómo llegar a hacer que lo que vemos y desarrollamos, sea posible.

La programación es una de estos campos que más ha evolucionado desde su inicio. Y cuando Dideco me mostró a Cubetto, y la posibilidad de enseñártelo, no dudé en decirle que sí, ya que si te gustan los juegos novedosos, las herramientas diferentes y la posibilidad de aprender a través de la diversión, creo que este juego te va a encantar tanto como a mí.¿QUÉ ES CUBETTO?
Cubetto es un robot de madera, aprobado por el Método Montessori, que enseña a los niños las bases de la programación informática de una manera muy sencilla, a través de la experimentación y el entretenimiento.¿PARA QUÉ EDAD ESTÁ PENSADO?
Cubetto está diseñado para niños de entre 3 y 6 años, pensando en el lenguaje comprensivo y expresivo, su imaginación y capacidad de comprensión.

¿CÓMO SE JUEGA?
Cubetto está formado por un robot de madera, un tapete de espacios y localizaciones, para que se desplace sobre él, un tablero para organizar y programar las acciones y movimientos de Cubetto y unas fichas que dicen a éste dónde debe ir (recto, giro izquierda, giro derecha y función).
Sobre el tablero debes poner el código que quieras que siga Cubetto y al darle al botón azul éste lo ejecutará.

Para iniciarse en el juego, lo principal es hacer entender al niño o a la niña, qué hace Cubetto, y cómo funciona el tablero. Lo primero es explicarle las funciones de cada una de las fichas y luego situar al robot en el espacio y que el peque aprenda a comprender cómo sus acciones influyen en el movimiento del robot.En nuestro primer contacto con Cubetto hemos observado que lo más importante es que los niños practiquen en cómo colocar las fichas en el tablero en posición correcta, y saber qué función realiza cada una de ellas.
Una vez reconocido esto, se pueden hacer trazados simples, de entre 3 y 5 órdenes. Y poco a poco se pueden ir empleando las fichas de función (de color azul) para poder realizar trazados más largos o complejos, que son éstas las que realmente introducen a los niños a la programación y que engloban hasta 4 órdenes en una misma ficha, pudiendo repetirlas varias veces a lo largo de un recorrido.¿QUÉ FOMENTA Y QUÉ APRENDEMOS?
Lo primero de todo es destacar lo especial y único que es este material, ya que no hay otro igual.
Se trata de un robot realizado en madera que nos enseña las bases de la programación a través de un tablero sin pantallas, que te permite tocar, aprender, programar y experimentar por uno mismo con un sistema de fichas, y que además ya está siendo utilizado por miles de profesionales de la educación en la etapa 3-6 años para enseñar a los niños cómo programar y emplear este tipo de sistemas, con lo que implica en su razonamiento y en su aprendizaje.Cubetto enseña al niño a aprender por sí mismo, ya que es un material autocorrectivo, que no necesita de instrucciones cerradas u orden concreto, ya que es el propio niño el que coloca las fichas sobre el tablero para guiar a Cubetto e ir viendo qué camino realiza.
Es importante saber cuáles son las órdenes posibles según las fichas, su color o dirección, pero más allá de todo eso, es un juego sencillo que no incluye unas normas cerradas.
Así si el peque descubre que alguna pieza no está colocada tal y como había ideado, podrá cambiarla en el momento sin necesidad de ayuda del adulto.

Es un material táctil, que permite que el niño o la niña lo toque, lo disfrute con sus sentidos y aprecie su participación y acción sobre él.
La experiencia sensorial es muy importante en el desarrollo de los niños, y todo aquello que incluye su participación y manipulación, hace que se involucren mucho más.Cubetto puede emplearse tanto sobre el tapete que incluye, contando cuentos sobre éste y haciendo que viaje a cada uno de los espacios, como de manera libre sin guía.
Al inicio puede que lo emplees sólo sobre el tapete, pero después los niños tienden a sacarle de éste y emplear otros elementos o juegos para enriquecer su juego, por ejemplo creando espacios como carreteras o ciudades y añadiendo construcciones de madera a su alrededor.

Cubetto favorece la imaginación y la creatividad, ya que se trata de un juego sin pautas cerradas, sencillo, con aspecto básico, que hace que el niño pueda elaborar y crear entorno a él.Es un juego único, que no tiene con quien compararse. La programación sin pantallas es algo muy novedoso.

Son infinitas las posibilidades que puede ofrecernos en cuanto a su recorrido.

Además, puede emplearse por varios peques a la vez, favoreciendo el juego cooperativo, en familia o en pareja.
En muchos casos, hay niños más pequeños, de dos o tres años, que comienzan únicamente queriendo guiar a Cubetto en su camino y dejando que sea el adulto quien lo programe, y que poco a poco según van viendo el juego y su funcionamiento, se animan a programarlo por sí mismos.

Cubetto activa el razonamiento lógico, ya que los niños deben aprender a situarlo y relacionar las órdenes de cada ficha del tablero con la acción que llevará a cabo el robot.

Enseña al niño a conocer el espacio, no sólo de sí mismo sino de alguien externo a ellos, como es Cubetto. Tienen que aprender a situarle en el espacio y conocerlo, sabiendo cuál es la derecha, la izquierda, recto o giro, según el robot.
Este hito es común que empiece a tomar más relevancia en sus vidas a partir de los 3 años, que es cuando los niños comienzan a preguntar por la derecha o la izquierda, aunque muchos será más tarde cuando lo aprendan definitivamente.Con este material los niños potencian su atención y la permanencia en una misma acción, de manera participativa, siendo ellos el sujeto activo y el cerebro pensante del juego. Son los verdaderos protagonistas de la acción que lleva a cabo el robot.

Cubetto también enseña al niño a anticiparse a la acción, sabiendo ordenar sus ideas y conocer lo que va a suceder en el movimiento del robot, antes de que esto ocurra. Es decir, el niño o la niña debe prever qué pasos colocar sobre el tablero para hacer que Cubetto llegue a la meta deseada.Además con este juego puedes fomentar el cuidado y la responsabilidad de un material único, que se mueve y comporta según le guías.

En su web puedes ver cómo funciona y además puedes conseguirlo en tu tienda Dideco más cercana o aquí en su web, donde te dejo un 10% de descuento para toda su tienda online con el código ATTEMPRANA, ya que aunque no es un material económico, sí que te aseguro que su precio está más que justificado por su calidad, innovación, resistencia y por la posibilidad de ser usado tanto en hogares como en escuelas infantiles, por varios niños a la vez y de generación en generación.